Durante muchos años, desde su invención hasta la aparición de la TV por cable o suscripción, el televidente debía ajustarse a la programación existente. Esta consistía en bloques diseñados buscando satisfacer los gustos de los distintos segmentos de la población, así se tenía un horario infantil a partir de las 4:00 pm hasta las 7:00 pm, luego programas familiares de 7 a 9 pm para luego dar paso a las famosas telenovelas a partir de las 9:00pm. Los pequeños no lograban encontrar mucho de interés que ver en televisión luego del bloque infantil, de la misma manera que los caballeros rara vez acompañaban a sus esposas a ver las novelas de las 9:00 pm. Lo frustrante es que todos los canales tenían bloques similares, no dejando muchas opciones para aquellos que quisiesen ver algo distinto a las novelas a partir de las 9:00 pm o de los programas de variedades los sábados por la tarde. La TV por suscripción puso fin a la rigidez televisiva al ofrecer canales por temas de interés. Así aparecieron canales solo de noticias, canales infantiles, canales de cocina, de deportes, para adultos, religiosos, de series, de películas y un largo etcétera.
Algo similar sucedió con el turismo. Hace algunos años el viajero sabía que en Paris visitaría la Torre Eiffel, en Roma el Coliseo, en Madrid pasearía por la Gran Vía, en Miami iría de compras y en Aruba a las playas. Dependiendo de lo que desease hacer, viajaría al destino que satisfaciese ese deseo. Sin embargo, la era de la interconexión cybernética acercó y facilitó el contacto entre personas con intereses similares. Ello fortaleció enormemente el turismo de nichos. Se desarrolló el turismo religioso, el de observadores de aves, el turismo LGTB, turismo gastronómico y turismo de aventura, por solo nombrar unos pocos. El turismo descubrió que ofreciendo al viajero la posibilidad de realizar alguna actividad de su interés, éste estaría dispuesto a pagar buen dinero para poder disfrutar de aquello que tanto le apasiona.
Es bajo este concepto que surge el glamping, que no es otra cosa más que “glamorous camping” o acampadas glamorosas. Es toda una red a nivel mundial que ofrece cabañas, campamentos y estadías en lugares donde un hotel de gran tamaño no tendría sentido ni cabida, así encontramos cabañas de lujo en las montañas Rocosas de Canadá, o en parques nacionales en diversas partes del mundo, o reservas salvajes en África o parques y lugares apartados en Nueva Zelanda. El alojamiento puede ser desde un Tipi (la característica tienda cónica del indio norteamericano), una tienda de campaña convencional, pero de dimensiones y comodidades difíciles de imaginar (pisos de madera, camas matrimoniales, agua corriente, etc.) un Yurk, una cueva, una casa en un árbol, hasta una cabaña o “cottage” con jacuzzi, mesa de billar, chimenea etc. Los precios pueden partir en los $60 para los tipi hasta llegar a superar los $1500 la noche, por cabañas de madera de lujo, donde la única forma de acceso es por helicóptero.
Tienda de campaña de lujo en medio de la sabana africana |
Portales especializados como www.glampinghub.com ofrecen miles de posibilidades. La mayoría de las propiedades tienen precios similares a lo que costaría una noche de habitación promedio en un hotel, es decir entre $150 y $250, pero en vez de una habitación tienen a su disposición toda la propiedad, sea una pequeña casa o cabaña en lugares tan exclusivos como Cape Cod en Massachusetts, las Smoky Mountains en Tennessee o el Napa Valley en California, en realidad el mundo es el límite. Si hacemos el desglose por persona (usualmente la capacidad promedio es para 4 a 6 personas) nos encontramos frente a una verdadera ganga que nos permitirá tener una experiencia única en lugares de ensueño.
Cabaña a orillas de un lago sin acceso por carretera |
Soy un convencido que el turismo de nichos es lo que puede darle a nuestro país la posibilidad de posicionarnos en un corto tiempo en el mapa mundial del turismo y la extensa red de posadas que tenemos a nivel nacional, pudieran ser la base de una versión criolla del glamping, una modalidad turística en auge y expansión, y sin duda, con mucho futuro.
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