Mirar por la ventanilla cuando el avión despega o aterriza ofrece una panorámica similar en la mayoría de los aeropuertos de España de mayor o menor extensión según los casos, pero por lo general la vista es la de terrenos baldíos alrededor del aeropuerto. En los próximos años el paisaje puede dejar de ser el de esos terrenos vacíos para convertirse en un mar de paneles solares.
Aena (la empresa que maneja los aeropuertos españoles) se ha propuesto convertirse en un gran productor de electricidad con energías limpias. El grupo, controlado en un 51% por el Estado español y con una red de 46 aeropuertos en el país, ha diseñado un plan para contar en los próximos con plantas fotovoltaicas en casi una veintena de sus aeródromos de toda España para reducir de manera sustancial su factura energética (cerca de 75 millones de euros el año pasado) y recortar sus emisiones de CO2 con energías verdes.
Aeropuerto El Prat, Barcelona |
Aena ya cuenta ahora con pequeñas instalaciones fotovoltaicas repartidas en ocho de sus aeropuertos españoles. Con todos ellos, el año pasado el grupo aeroportuario acumuló una producción eléctrica de apenas 4,1 gigavatios hora. El objetivo del nuevo plan que ahora arranca es multiplicar por más de 150 esa producción y dispararla hasta los 650 gigavatios hora (GWh) al año, según las estimaciones que maneja la dirección de la compañía.
La lista de nuevos aeropuertos que se llenarán de paneles solares aún no está cerrada y se estudian decenas de ubicaciones. De momento, la dirección de Aena tiene claro que se construirán nuevas plantas fotovoltaicas en las dos joyas de la corona de su red, los gigantes de Madrid-Barajas (donde ya cuenta con una pequeña instalación) y Barcelona-El Prat.
Una de las grandes metas es conseguir que los aeropuertos de Madrid y de Barcelona –que concentran la mitad del total de las emisiones de la red de Aena- consigan ser neutros en sus emisiones de carbono al final de la próxima década, según reconocen desde el grupo comandado por Maurici Lucena. La compañía en otro pilar estratégico de futuro para diversificar ingresos ha puesto en marcha dos megaoperaciones inmobiliarias en Madrid y Barcelona para conceder suelo para que se instalen cerca de los aeropuertos hoteles, empresas y centros logísticos, y también estudia implantar proyectos similares en Mallorca, Málaga, Valencia y Sevilla.
Fuente: el independiente